domingo, 25 de noviembre de 2012

La culpa no es del chachacha, es de la piratería, ¿verdad?



Acabo de salir del cine. Bueno, cuando escribí este post ;-)

Si, he ido. No me he descargado la película.



Y mientras aún digiero las sensaciones y lágrimas que me han dejado sin reservas, pienso en todas las pamplinas que nos hacen tragar.

Que si la piratería, que si las descargas, que si el top manta, que si patatín, que si patatán ...

¿ Sabéis como yo llamo a todo eso? Excusas.

Excusas para no tener que abrir los ojos a una nueva realidad. Excusas para no admitir equivocaciones. Excusas para poder seguir chupando del bote.

Y es que si las películas que se hicieran aquí en España fueran películas de las que te emocionan, con las que te sientes identificado, de las que quieres ir por no perderte las sensaciones, únicas, que solo se viven estando en un patio de butacas y enfrente de la gran pantalla, si las películas que se hicieran fueran pensando en el espectador y no en cubrir expedientes, cupos o como quieran llamarlo ... entonces, las salas, estarían llenas.

Y si encima, bajaran el precio de las entradas, simplemente taponando algún que otro agujero de los que hay por el camino y que hacen que todo se encarezca para el consumidor final, entonces las salas estarían a rebosar.

Porque la gente sabe diferenciar. La gente entiende aunque algunos pretendan lo contrario. La gente sabe lo que es justo, profesional y sobre todo, razonable.

Podrán seguir viviendo del cuento. Podrán ahogar sus penas en subvenciones, cánones y otras lindes. Podrán seguir negándose a ellos mismos. Lo único que consiguen de esa manera es ir cavando la tumba de su propio negocio.

Mientras, otros, que han sabido evolucionar, madurar, entender lo que el público quiere y reclama, sentirán una gran satisfacción por el trabajo bien hecho.

Y habrán hecho de lo imposible para algunos, lo posible para todos.

miércoles, 14 de noviembre de 2012

FELIZ HUELGA GENERAL



Yo hoy también hago HUELGA.



Hago huelga general contra:

  • El Gobierno. Por no ser claro y no explicar las cosas tal y como son. Por no entonar el mea culpa en lo que así sea.
  • La Oposición. Por subirse al carro cuando ellos mismos han sido los que han provocado en gran medida que la carretera esté y sea intransitable. Por ponerse ahora del lado de los que, un día no muy lejano, dejaron de lado.
  • Los Sindicatos. Por su inmensa hipocresía. Por querer bailar con la más guapa cuando solo se merecen hacerlo con la mas fea. Por no mover ni un dedo hasta el día que les toco a ellos.
  • Los Bancos y Grandes Empresas. Porque solo hablan de crisis, necesidad de medidas urgentes y contraprestaciones, ayudas y demás prebendas y no se les cae la cara de vergüenza cuando salen, además públicamente, a dar sus resultados que son peores que otros años, que pena!, pero se olvidan de que siguen siendo de cualquier otro color menos el rojo.
  • Los Medios de Comunicación. Por ser altavoces de quienes les dan de comer en vez de ser transmisores de realidades.
  • La Sociedad en general. Por su crónica negatividad. Por sus continuas quejas. Por hacer de su existencia la defensa de unos colores políticos en vez de poner todo su esfuerzo por conseguir el bien común. Por criticar pero no actuar.
  • Los que no respetan los derechos fundamentales de las otras personas. Por creer que sus ideas son la única verdad y creerse con el derecho de decidir por los demás y coartar libertades bajo la bandera de la libertad hecha libertinaje y amparada por el poder de la jauría.
Por todo ello, me sumo a la huelga y por tanto,
  • Trabajaré como el que más. Como el que tiene trabajo y siendo autónomo sabe que un día perdido es un hachazo en toda regla. O como el que no tiene trabajo pero sale cada mañana a comerse el mundo pues sabe que el trabajo no va a venir a buscarle y por eso sale, actúa  piensa, se mueve para encontrarlo cueste lo que cueste. O como el que no puede permitirse que le quiten un día de sueldo porque lo verdaderamente importante es su familia y que puedan comer.
  • Reflexionaré para que la próxima vez, ya sea en las urnas o en cualquier otra situación, mi voz se pueda escuchar alta y clara, sin el condimento politizado, orquestado e hipócrita de huelgas como la presente.
  • Cambiaré mi negatividad por positividad. Intentaré actuar en consecuencia. Disfrutaré de cada pequeño avance o de cada pequeña satisfacción que pueda brindarme el día a día.
Te sumas? Yo si y no soy el único. Contamos contigo.

P.D. Me enorgullezco por toda esa gente que hace huelga por convicción, cosa normal con la que está cayendo, y no porque se lo digan. Eso si, creo que hay otras formas de luchar por conseguir lo que es nuestro y por lo que nos merecemos.



viernes, 9 de noviembre de 2012

Cuando ya no te queda nada ...



Es un instante, son recuerdos, sensaciones vividas, compartidas. Es toda una vida que se va, que se pierde.

Cuando llega ese momento, cuando vas siendo consciente de que es la hora, cuando miras a tu alrededor y ya no te queda nada, te sientes solo, perdido, desorientado, confuso, abandonado. Y a pesar de que posiblemente cuentes con la compañía, apoyo y comprensión de los que te quieren, es un momento de total soledad.

Hoy nos hemos enterado de que una mujer, cuando iba a ser desahuciada de su piso, ha tomado la decisión de saltar al vacío. Su pequeño momento de libertad ha durado cuatro pisos. Después, silencio.



¿Hasta cuando vamos a seguir consintiendo estas cosas? ¿Hace falta algo más?

Ya está bien de tanta hipocresía, de tanta boca llena de quejas sobre la crisis mientras los bolsillos rebosan de los beneficios obtenidos que, aún siendo menores que otros años, siguen siendo beneficios.

Ya está bien de poner la mano para recibir dinero que al final solo sirve para limpiar sus cuentas de resultados y por otro lado, hacen oídos sordos a las peticiones razonables que se les exigen para purgar su parte de culpa.

La música no va con ellos pero cuando te descuidas, cogen los instrumentos y tocan la melodía que les interesa.

Es hora de poner freno y cordura a toda esta situación. Es hora de ser humildes y partir de cero. Es hora de comenzar de nuevo a caminar todos en la misma dirección.

Mientras tanto, mientras llega ese momento tan esperado y deseado por muchos, no todos los casos son lo mismo pero hay situaciones que se deberían de estudiar muy a fondo y no meter en el mismo saco a todos. Hay familias que se quedan en la calle, sin nada y con críos pequeños que no tienen la culpa ni el por qué sufrir tal horror.

Seamos serios y pongámonos a trabajar en lo que realmente importa. ¿La gente que prefiere? ¿Ser independiente o conservar su vivienda? ¿Que se tiren piedras unos políticos a otros o que aúnen fuerzas para arreglar este país? ¿Que nos vendan historias del país de las maravillas o que dejen de gastar el dinero que es de todos en cosas que no son necesarias aunque agraden el ego de ciertos personajillos?

¿Tan difícil es?

Yo creo que no. Todo es cuestión de actitud y como ejemplo solo tienen que mirar a toda esa gente que sigue adelante aún habiéndolo perdido todo.



miércoles, 7 de noviembre de 2012

No habrá iPad para los malvados



Parece ser que no habrá iPad para los "malvados". ¿Será verdad?

Pongámonos en situación.

Al comenzar la legislatura, los diputados reciben un pack tecnológico que consta de un móvil de última generación (iPhone), línea ADSL en su domicilio para estar conectados a Internet y una tableta iPad que sustituye al ordenador portátil de antaño.



En los 9 meses que llevamos de legislatura, 30 de los 350 diputados han perdido su tableta. El congreso se los ha repuesto pero ha dicho basta al terminar con las reservas que tenia para este cometido.

La verdad es que se podrían decir muchas cosas al respecto pero creo que únicamente diciendo que es el reflejo de lo que ocurre en este país en general con lo público, ya vamos servidos.

En el ámbito público se desperdicia, se malgasta, se pierde mucho material. ¿El motivo? porque no lo sentimos como nuestro, cuando lo es, y porque pensamos que el pozo nunca se va a secar.

Pero el pozo está muy pero que muy seco y las cosas deberían de cambiar.

O hacemos una gran reflexión sobre todo ello y cambiamos de actitud, o mal vamos. Las cosas ya no pueden ser como antes. Hay que darle la vuelta a todo o a casi todo, intentando no perder demasiado, pero no queda otra.

Si perdemos, será también por culpa nuestra aunque nos gusta más buscar la responsabilidad en otros. Y es cierto que otros son los más responsables en esta situación pero todos tenemos, en mayor o menor medida, parte de culpa.

Es un mal sueño. Hay que despertar. No sirve de nada sumirse en encantamientos del pasado. Es hora de abrir los ojos. Es hora de actuar. De ser consecuentes. De ser responsables.

Y ahí es donde empieza a rechinar todo el engranaje pues los que deberían ser los primeros y dar ejemplo, son los que parece que la cosa no va con ellos.

Creo que somos una sociedad que sabe apretarse el cinturón, que sabe adaptarse a las circunstancias, pero lo que no es y nunca será, una sociedad de tontos.

Protestas las tendremos siempre. Va en nuestros genes. Pero a la hora de la verdad, si conseguimos apartar ese desencanto que se ha instalado en una gran mayoría de la sociedad, la respuesta será provechosa, contundente e ilusionante.

Pero para ello, hace falta que ciertas personas tomen el mando, que digan las cosas como son, que empiecen a actuar en consecuencia y por supuesto, den ejemplo.

Y ese ejemplo empieza por algo tan sencillo como sentir suyo y de todos, aquello que se les da por desempeñar cierta responsabilidad.

Entonces, la película cambiará y si habrá iPad para los diputados.