Existen dos tipos de personas y, por lo tanto, dos tipos de empresas.
Las que se ponen en marcha aunque no se vea el camino por la niebla y las que esperan a que se disipe la niebla para ponerse a andar.
Lamentablemente, ganan por mayoría las y los que esperan.
Dicen que, nos acordamos de Santa Rita cuando truena. Y es verdad.
Si hablamos de Social Media, las empresas saben que está, saben que existe pero lo dejan a un lado, por el momento. Y las personas, al igual que las empresas, hacen más o menos lo mismo.
Podrás decirme: "pero si tenemos una fanpage de empresa" o "yo utilizo twitter y facebook". Si, nadie dice que no tengas presencia en redes sociales pero, ¿Tu presencia es efectiva? ¿Tu presencia sirve para algo?
Estar en redes sociales tiene que venir precedido por un objetivo. Recuerda que todo lo que pones queda publicado por los siglos de los siglos y, a veces, puede ser un lastre demasiado pesado.
Tanto si eres empresa como una persona particular, te recomendaría que te plantearas un objetivo claro para estar en redes sociales.
Una vez tengas ese objetivo, ponte a ello. Desembarca, pero hazlo en conciencia.
Las redes sociales no son la panacea. Si que ayudan pero no te van a proporcionar el poder retirarte a disfrutar del resto de tu vida en una playa caribeña disfrutando de la buena vida.
Habrá casos que así haya sido pero te aseguro que esos casos no serán únicamente por haber estado poniendo ofertas en facebook.
Estar en redes sociales parece que sea lo único para que la gente te conozca y por consiguiente, vender más o que te puedan buscar para contratarte. Si es lo que piensas, olvídate.
Las redes sociales si que son una puerta al mundo pero para que el mundo quiera ver que hay detrás de tu ventana, el contenido y lo que ofreces tiene que ser de calidad. Por lo tanto, ten claro lo que ofreces y hazlo atractivo y de calidad.
No creas que las redes sociales no cuestan dinero. El mito del gratis es eso, un mito, pues estar en redes sociales puede no costarnos dinero, en un primer momento, al crear los perfiles en las distintas redes sociales pero, después, el estar día a día, el generar el contenido, el saber como interactuar y fidelizar a tus seguidores, cuesta dinero. Cuesta tiempo y el tiempo es oro.
Y como el tiempo es oro, no debemos de perderlo. No porque todo el mundo esté en Facebook o en Twitter nosotros también debamos de estar. Puede que si, puede que no. Dependerá de nuestro objetivo y de a quien queramos llegar. Existen muchas redes verticales, específicas de sectores o temáticas, que a lo mejor nos son más rentables pues llegan más directamente al público que nos interesa.
Y, por último, retomemos la idea primera de este post. No esperes a que la niebla se disipe. Los tiempos cambian y no debes dejar pasar ni un segundo en aprovechar las oportunidades que te brindan las nuevas herramientas, la nueva tecnología, las redes sociales.
Si eres una empresa, no esperes a que te vaya mal el negocio para aferrarte a las redes sociales como clavo ardiendo que vaya a solucionar tus problemas. Hazlo ya, cuando aún te van las cosas bien.
Si eres un particular, no esperes a que te despidan. Empieza ya, si tienes trabajo o si estas en búsqueda activa de empleo, pero hazlo con cabeza. Tu también tienes que marcarte unos objetivos, como cualquier empresa.
Y recuerda, que si no sabes como moverte en estas aguas, siempre están los profesionales que te ayudarán mediante formación, consultaría o gestionando tus cuentas.
Venga! Empieza YA!!!
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